Esta Navidad regresa el color y las tendencias de maquillaje te animan a experimentar con él, sobre todo, en la mirada, donde los pigmentos más intensos centran toda la atención en este rasgo. Como opción para las más atrevidas, el azul en todas sus versiones (desde los turquesas hasta los oceánicos) será el encargado de crear los ahumados nocturnos que ponen el acento festivo en Nochebuena o Fin de Año. Sin embargo, las pasarelas y las campañas de belleza navideñas están protagonizadas por otro tono que le lleva la delantera a todos los demás. Hablamos del amarillo en versión mate o dorada, un look universalmente favorecedor que tiene la propiedad de eliminar el cansancio por su efecto iluminador inmediato.
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El punto de luz que abre la mirada
Aunque verás que los amarillos se llevan también sobre todo el párpado, hay veces que las sombras metalizadas de acabado dorado se aplican tan solo en el lagrimal. Se trata de un truco profesional al que recurren muchos maquilladores para abrir por completo la mirada cuando trabajan para clientas que van a pisar la alfombra roja y la razón es que este gesto fácil consigue eliminar el cansancio por su "efecto luz" instantáneo. Esta sombra iluminadora se aplica en la esquina interior del lagrimal como se vió en el último desfile de Lanvin y tiene la particularidad de resultar universalmente favorecedora y de lograr los mismos resultados sin importar el color del iris o el tono de piel.
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Ahumado soleado
Y si Lanvin propone una aplicación precisa y localizada, desde Dior Beauty apuestan por un maquillaje ahumado en clave luminosa: si los smoky eyes que se ven normalmente están protagonizados por sombras oscuras que destacan la mirada con acento dramático, esta Navidad llega rodeada de luz y el look del momento lo demuestra. De nuevo, los dorados de matices amarillentos serán las estrellas de la tendencia y al aplicarlos alrededor de todo el contorno se camuflan las ojeras y se abre la mirada. Otra de las ventajas de optar por tonalidades claras es que se pueden combinar con labiales intensos sin caer en un acabado recargado.
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Sombra mate y saturada
La versión más cromática de la sombra amarilla es mate, altamente pigmentada y los expertos de Nars la completan con un delineado negro que consigue que el tono destaque aún más. Como técnica para lograr un acabado así de intenso, aplica el color con un pincel plano a suaves toquecitos que dispensen el color en lugar de con movimientos de barrido. De esta forma, se mantiene una concentración adecuada de pigmentos y se logra el efecto saturado. Como plan B al alcance de todas, incluso de las menos habilidosas, siempre se puede sustituir la brocha por la yema de los dedos y realizar el mismo gesto de tapeteo.
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Con 'efecto antifaz'
Por último, Shiseido propone la versión más espectacular de la tendencia festiva a través de un ahumado que se aplica sobre todo el contorno incluyendo el párpado inferior y llegando hasta el punto más alto del fijo. En este caso no solo se consigue centrar toda la atención en la mirada y lograr una expresión descansada sean cuales sean las horas reales de sueño, también se crea la ilusión de una "acción tensora" al aplicar un pigmento luminoso sobre el hueso de la ceja. Como gesto fundamental, utilizar una capa de máscara oscura tanto en las pestañas superiores como en las inferiores destaca la forma del ojo que se perdería al estar rodeado de una tonalidad tan clara.
